El Buscón de Quevedo Nuestro Siglo de Oro |
La globalización, la recesión, las altas finanzas carentes de moral, el empleo precario carente de moral, las políticas y movimientos de inmigración masiva carentes de moral, etc., todo ello ocurre obedeciendo a motivos de los que no tenemos ni tendremos jamás información fiable (gracias a los medios), pero cuyos efectos sí experimentamos nos expliquen lo que nos quieran explicar los medios. Por ejemplo, antes, un mileurista era considerado como un paria y ahora los canales de tv se encargan sutilmente de presentarlo como a un privilegiado vencedor. Guai, que se las arregla con los mil Euros y encima comparte fiambrera de buen rollo con los "compis" del trabajo. Y hay miles de ejemplos más, pero creo que la idea se ha captado ya. En realidad, esta gran mentira de la igualdad está acercando el Primer Mundo al Tercero y no el Tercer Mundo al nivel del Primero. Esa es la forma de control a la que en realidad aspiran los populistas junto a los sistemas teocráticos; y ellos lo saben, aunque prediquen lo contrario. Si la partidocracia (no vivimos en democracia) casi ha destruido a la clase media que heredó del franquismo, los populistas la barrerían por completo del mapa. De culminarse sus pasiones, las sociedades estarían compuestas por una masa de pobres muy pobres y unos pocos ricos muy ricos, controlando la producción y distribución pero no de la riqueza, sino de la pobreza bajo un sistema absolutamente fascista que ellos llamarían democracia.
Si vemos unas pisadas sobre la nieve podemos deducir que alguien ha pasado por allí, y también esas mismas pisadas evidencian hacia dónde se dirigen las huellas.
Debido al papel de universidades y medios de comunicación, pisadas en la nieve son las únicas pistas que tenemos ante todos los cambios vertiginosos que están ocurriendo en poco tiempo, y apuntan todas ellas a un mismo punto cuya interpretación depende de nuestra formación e inteligencia. Todas las evidencias convergen en la destrucción de la cultura occidental y de la clase media, es decir, la destrucción no solo de una civilización con más de 3000 años de historia sino de los logros que se consiguieron tras el paso de una cultura greco-romana, una Edad Media, un Renacimiento, una Revolución Americana, las Revoluciones Europeas, nuestro arte; nuestra forma de vida, en definitiva. Quieren destruir nuestra forma de vida y nuestra cultura. Y hasta aquí puedo leer. Como pista: en este momento, dos filosofías políticas tienen ese objetivo y además tienen los medios económicos y mediáticos para conseguirlo. Esos dos sistemas políticos además no se cortan en manifestarlo.
Pero todavía estamos a tiempo: si somos capaces de detectar el problema estamos dando un paso muy importante; el primero hacia la solución.Si ellos odian la democracia hay que contestar con más democracia, pero con de la de verdad.
V. J.
Hace algún tiempo Warren Buffet dijo: Esta es una guerra entre los ricos y el resto, y la vamos ganando nosotros.
ResponderEliminarEl capital es un virus para el que ultimamente no hay ya vacuna, que eran los estados socialdemocratas y cristianodemocratas occidentales, pero el virus ha mutado con estas brutales migraciones y ya no tiene barrera para sojuzgarnos.
Acabaremos por tener que defender nuestra vida, que es nuestra cultura a sangre y fuego. A mis nietos les queda una buena, acarajotados como los tienen estos sistemas in-educativos.
Hace algún tiempo Warren Buffet dijo: Esta es una guerra entre los ricos y el resto, y la vamos ganando nosotros.
ResponderEliminarEl capital es un virus para el que ultimamente no hay ya vacuna, que eran los estados socialdemocratas y cristianodemocratas occidentales, pero el virus ha mutado con estas brutales migraciones y ya no tiene barrera para sojuzgarnos.
Acabaremos por tener que defender nuestra vida, que es nuestra cultura a sangre y fuego. A mis nietos les queda una buena, acarajotados como los tienen estos sistemas in-educativos.
D. Pedro
EliminarHa puesto Vd. el dedo en la llaga.
No es casualidad que la palabra "islamofobia", aplicada a personas a quines no nos gusta que nos pongan bombas, es invento de la zurdería...cuya ISLAMOFILIA es debida a un objetivo en común compartido por terroristas islamistas y comunistas. Asimismo tanto la zurdería como el islamismo tienen individuos que no son aún o todavía terroristas; la palabra clave es aún, o todavía...`por el momento.
ResponderEliminarSolo hay que ver de quién cobraba "el coletas
EliminarEl comentario de Don Pedro Alejandro Iñigo es genial. Un perfecto resumen.
ResponderEliminarDesde luego. A buen entendedor... Un abrazo Antonio ;.)
EliminarHas pensando don Vicente en nombrar a esos culpables, por que tendrian un nombre, y estaran organizados, y obviamente buena gente no son, y el pueblo muy listo no debe de ser en general, por que todavia no han perdido la Cabeza de sus amos, supongo que son/somos culpables de nuestro destino.
ResponderEliminarQue to sepa, del Estado, ningun servidor publico va a ayudarnos...
Es mas, si son de una ideologia u otra, acaban coincido end y haciendo amistad en bodas, bautizos, comuniones, consejos de administracion y Colegio de elite, y acaban riendose del pueblo.
http://espiaenelcongreso.com/2013/09/06/650-hijos-de-la-casta-espanola-organizaron-una-masiva-orgia-en-sus-vacaciones-de-verano-para-olvidar-el-caso-barcenas/
Personalmente, nunca he dejado que se town en mi cara, el pueblo espanol creo que si.
Saludos, y buen posteo.
Islamismo aparte (que no es poco), la paleta cromática de la organización política internacional está compuesta básicamente por dos colores: libertad e igualdad. En la cuasi-infinita gama que se obtiene al combinar ambos conceptos en distinta proporción, queda incluida la definición de cada una de las estructuras sociales occidentales actuales: Se puede optar por una fórmula en la que lo prioritario sea la libertad (liberales), o establecer unas normas de convivencia en las que haya de prevalecer la igualdad (socialistas).
ResponderEliminarLo que deberían tener claro los que amenazan el statu quo es que el mundo que hemos heredado no es sino una carrera en la que, un minuto después de haber que ha sonado el pistoletazo de salida, cada corredor ha desempatado su igualdad con los que empezaron la carrera junto a él; y que pretender que la igualdad se perpetúe a lo largo de toda la carrera la convierte en un desfile (piénsese en una parada militar), en el que los que desfilan pierden toda la libertad.
Conozco a muchos que son más de desfiles que de carreras, y conste que considero tan digno serlo así, que de lo contrario, con tal de que los que marcan el paso no me vengan a lloriquear en demanda de ese preciado tesoro que es la LIBERTAD.
Excelente aportación al artículo amigo Rafael. En especial la comparación de la imagen del desfile militar con la carrera es absolutamente genial. Da para un artículo.
EliminarHay que reconocer que La estética de los desfiles es mejor que la de las carreras, sin embargo, tienen el problema de que, para que las filas no se desperdiguen, el conjunto de la tropa debe marchar al paso de los más lentos; ¿Qué pasaría, si no, en la retaguardia, donde desfilan los más bajitos, si los gastadores de cabeza marcharan al ritmo que le piden sus largas piernas?
EliminarSiguiendo con esta parábola, ¿qué pasaría en una sociedad si sus élites deben someterse al ritmo de los menos eficaces? ¿Qué, en lo económico, ante el empuje de las economías más competitivas de los países emergentes? ¿Qué, en lo intelectual, ante la eficacia de las sociedades que miman a sus investigadores? ¿Qué, en lo militar, cuyas tropas deben hacer frente antes o después a la amenaza yihadista?
Me temo, amigo Vicente, que, remedando a Cervantes, “la igualdad, Sancho, es uno de los más caros dones con el que los cielos tentaron a los hombres, pues convierte en víctimas a los más valerosos luchadores que pisan la tierra y navegan por los mares”.
si,todo eso está muy bien,y estoy de acuerdo de la A a la Z,pero todos tenemos culpa de ésta decadencia,de ésta degeneración...todos decimos:si si,ya lo sé,esto está fatal pero no me toquen mi coche,mi fútbol,mi teléfono móvil,y prometo no decir nada y no quejarme;es decir:menos lloros y más acción,pues no Esperemos nada de nada de estos políticos(todos)que sólo piensan en medrar,y que son como sardinas en un cubo de basura,que brillan mucho pero apestan
ResponderEliminarGracias por el comentario: los que tienen que tocar sus prebendas y coches son los políticos, los enchufados en ayuntamientos, asociaciones, los medios, sindicatos, patronales, administraciones multiplicadas por diecisiete (17 Comunidades Autónomas) En fin, la casta y las CC AA son el problema. No nosotros: si tenemos un coche es porque nos lo hemos ganado con nuestro esfuerzo. No podemos sentirnos culpables por ello. Tampoco somos culpables de la casta, ya que individualmente un ciudadano no tiene poder alguno ante el Poder. Solo un poder puede enfrentarse a otro poder (Montesquieu)
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