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domingo, 20 de diciembre de 2015

No se ha votado "a favor de" sino en contra de


Antes habíamos asistido a un estrepitoso fracaso en Grecia, a la que nadie nombra ahora como ejemplo, con el resultado que todos hemos visto; y en España, ahora, se están confrontando dos visiones sobre la realidad que polariza peligrosamente a nuestra sociedad, sin darle opciones de elección.

Es falso que el bipartidismo haya desaparecido: lo que ha ocurrido con el bipartidismo es que se ha polarizado de tal forma que en estas elecciones no se ha votado a favor de, sino en contra de. Por un lado una parte de la sociedad es la que mantiene esto en marcha con sus madrugones, sus muy empeoradas condiciones de trabajo, sueldos mileuristas; su esfuerzo y sus equilibrios para llegar a final de mes.

Por otro lado está quien intenta entrar como sea en ese grupo saliendo del paro. Pero lo que nadie se atreve a decir porque resulta políticamente incorrecto es que aprovechándose de nuestras leyes hay una parte de vagos profesionales que esperan vivir eternamente montados en la subvención; y que en nuestra sociedad son muchos, españoles y no españoles, los que se encuentran en ese grupo. De tener representantes de verdad yo elegiría a quien prometiera revisar este tema para paulatínamente ir integrando a todos de verdad en nuestra sociedad obligándoles a dejar de vivir del cuento sin diferenciar el color de la piel, el origen o la religión. Eso sí que sería integración.

Se puede tener en la vida un mal tropiezo por una mala conjunción de los astros; aunque en estos momentos, los astros sean otros distintos a los que se refiere la astrología. Cuando es todo un país el que va mal, más bien estaríamos hablando de una conjunción de decisiones torpes, decisiones malas o decisiones perversamente corruptas que tomaron algunos políticos y financieros. Y como no siempre los otros tienen la culpa de lo que nos pase a nosotros, porque, a veces, las cosas nos las buscamos nosotros solitos; la mala estrella puede venir también dada por malas decisiones personales. En fin, que sin saber cómo ni por qué la vida te da un vuelco para mal cuando menos te lo esperas. Pero eso es vivir. Y aquí es donde se divide la sociedad: entre los que creen que las castañas nos las quitará de fuego papá Estado (con la pérdida de libertad que conlleva esa opción) y los que luchan con su esfuerzo por quitarse ellos mismos las castañas del fuego.

Cuando es un país entero el que da el vuelco para mal, por lo que sea, siempre hay rateros cuya única ambición es pescar en ese río revuelto de fracasos y frustraciones. Son los que engolosinan al primer grupo y ahí salen los populistas como los caracoles después de la lluvia. Es cuando la promesa de la solución fácil e inmediata tiene más posibilidades de ser escuchada. Es cuando el eslogan, los castillos en el aire y las promesas imposibles aparecen como tablas de salvación de aquel que se encuentra en situación de desgracia. Lo que el desesperado cree es que sin compromiso, responsabilidad y mucho esfuerzo saldrá del túnel negro. Todo falso y más que falso: falso que el maná caerá suavemente del cielo por solo votar a quien ofrece soluciones descabelladas. Por ejemplo, es falso que la sanidad salga gratis por mucho pancartero profesional que así lo proclame. No existe nada gratis, y si prestamos la sanidad a todo el que llegue de fuera de forma gratuita hemos de afrontar las consecuencias de semejante medida. ¡Ah! Que pongan más dinero. Bien pues ¿cuánto dinero estás dispuesto a sacar directamente de tu bolsillo para que esa sanidad sea “gratis” también para todo el que llegue del extranjero? Esa es la cuestión. Es falso que haya abundancia sin esfuerzo y sin un coste; y que en España podamos atar a los perros con longanizas. Otra solución para lograr esa gratuidad en lo que sea sería: ¿estás dispuesto a luchar y manifestarte en la calle por instaurar una democracia formal, o recortar  o mejor quitar las CCAA que abarataría exponencialmente el coste del Estado y nos aportaría de sobras ese dinero para mantener esos "servicios gratuitos” e incluso pagar la deuda en un par de meses?

Las coordenadas del populismo son falsas, y nos alejan de la libertad. Los populistas no pretenden igualar nada, solo pretende rellenar los nichos de poder y fagocitarlos como amebas. Son lo más parecido a un virus: incapaces de sintetizar y solo capaces de reproducirse con la materia que han sintetizado otras células. Esto quiere decir: incapaces de constituirse como creadores de riqueza, quieren repartir a su antojo con quienes se les antoje la riqueza que han creado otros. Eso es la izquierda polarizada.

domingo, 28 de junio de 2015

Cuando las barbas de tu vecino griego veas afeitar...


“Cuando las barbas de tu vecino veas afeitar, pon las tuyas a remojar”, dice adecuadamente el refrán popular.., de aquella época remota cuando el pueblo era sabio aunque fuese analfabeto. A falta de tradición escrita el pueblo transmitía su saber de forma oral. Ahora hemos perdido la escrita y la oral porque ha sido sustituida por la corrección política socialdemócrata.

Ya comenté en otro artículo los mecanismos motores del populismo, que desgraciadamente se están mostrando a pleno rendimiento a lo largo de estos aciagos momentos para Grecia y que nos muestran el camino que seguiríamos en España en caso de triunfar también el populismo.

El populista Tsipras, como todo buen populista es tan solo apariencia y vive de las apariencias; pero nunca se atreverá a atajar ningún problema y mucho menos a solucionar nada. Su chulesco y extremadamente mediocre ministro Varufakis, cuyo único mérito ha sido utilizar el insulto sistemático y los exabruptos a la troika (Comisión Europea, BCE y FMI) es pura apariencia, pero no se atreverá jamás a pedirles, por ejemplo, ni un céntimo de Euro a los griegos supermillonarios corruptos que jamás pagaron impuestos en Grecia y seguirán sin hacerlo. Lo que quieren evitar los populistas, a quienes Pablo Iglesias apoyó, es que el pueblo Griego no les responsabilicen de que las promesa realizadas para subir al poder eran imposibles de cumplir. Un populista jamás admitirá ninguna culpa por la situación que crea: “No os preocupéis: ya les diré yo lo que pienso a esta banda de chorizos cuando yo gobierne y los pondré a todos firmes...” y el populacho les aplaude hasta con las orejas. “¡Hay que ver cómo nos defiende.., lo que les ha dichooo”. Pero claro, solo un iluso puede creer que esa es la forma de defender al pueblo. Y el populista los lleva a todos al punto de no retorno; y cuando el avión se va a estrellar el piloto que ha cogido los mandos porque el avión ya peligraba en pleno vuelo les pregunta a los pasajeros: “¿y ahora qué hacemos? Y el populacho vuelve a aplaudir hasta con las orejas y grita por las calles: “esto sí que es democracia, nos lo consultan a nosotros.., aquí mandamos nosotros”. Pero lo que el pueblo griego no ve es que sus populistas dirigentes no quieren ninguna responsabilidad por gestionar  mal un problema y lo fácil es encontrar a un culpable: así que la culpa se la echan al pueblo con una pregunta intoxicada a la que ni ellos mismos ni todo el conjunto de expertos es capaz de responder: la responsabilidad para el pueblo, que no se entera de nada, convocando un referéndum; y así sumamos otra de tantas mentiras: en un referéndum tienes que poder elegir entre varias opciones, pero como aquí solo hay dos opciones se trata en realidad de un plebiscito. Un plebiscito es una pregunta donde todo está programado y en realidad se resume en una pregunta Si/No donde todo está planificado para que salga lo que la oligarquía que la plantea quiere que salga. Para eso están todos los aparatos mediáticos controlados por esas mismas oligarquías.

Es inhumano pasarle al pueblo el problema creado por la chulería y mediocridad de un Varukakis ministro de economía cómplice del populista Tsipras, que engañó al pueblo halagándolo y prometiendole todo aquello que sabía era imposible de cumplir: así de simple. Los populistas mienten al pueblo diciéndoles que harán aquello que es imposible hacer. Y el pueblo, crédulo, les vota y después sufre las consecuencias.


¿La situación actual? Europa no se atreverá a echarlos porque en el fondo son socialdemócratas capaz de decir una cosa y su contraria sin ningún rubor, y los griegos tampoco se atreverán a irse.. No hay peor mentira que una verdad a medias; efectivamente, hay una serie de culpas que forman una luctuosa cadena, pero la puntilla a Grecia se la han dado los populistas, populistas a quienes fue a apoyar Pablo Iglesias. El gobierno populista griego jamás entró para solucionar nada sino para complicarlo todo. Pero existe un peligro agazapado mucho mayor que no solo amenaza a Grecia sino que puede amenazarnos a todos en cualquier lugar de Europa. La Segunda Guerra Mundial lo derrotó pero puede resurgir de sus cenizas: esta situación tiene muchos números para llevarnos directamente al fascismo. Es el paso siguiente a todo populismo: el poder por el simple poder y ya no solo estarán los partidos incrustados en el Estado, sino también las masas populares. El Estado lo será todo...

Todo resulta tan aterrador que uno se ve obligado a compartir estas verdades tan evidentes y por lo que mi defensa al pueblo se basa en todo lo contrario: separación absoluta de poderes y representación desde el origen; siendo este origen la sociedad civil. De momento no existe un partido no solo en España sino en toda Europa que proponga estos principios de libertad colectiva.

Vicente Jiménez


sábado, 24 de enero de 2015

Olvidaos para siempre de la libertad, o luchad por ella

TBO Cortesía de http://seronoser.free.fr/tausiet/tbo/TBO.htm

Así que tenemos una universidad donde algunos grupos de mangantes amparan huelgas de estudiantes para mantener a las poderosas mafias universitarias dentro de sus privilegios de casta y así  manejar jugosos presupuestos. Y por otra parte hemos tenido conocimiento de cómo un profesor  puede ser contratado sin que ni siquiera tengan que presentarse en ningún sitio a trabajar ni nadie controle su "investigación". Así andamos en la clasificación de universidades mejores valoradas frl mundo ¿Dónde quedaron las limpias y justas oposiciones a cátedra o profesor como esas que permanecen resistiendo como residuo honorable para la enseñanza primaria y secundaria?

Y por otro lado tenemos a un elenco de próceres genios de la ciencia política que dan el salto a la fama como los concursante de un Gran Hermano  gracias a ciertas machaconas cadenas de TV y dicen querer salvar no digo ya a España; pretenden salvar a Europa entera con un par de parlamentarios en Bruselas y esperando catapultarse directamente a tomar “por asalto” la presidencia del gobierno. Y lo dicen henchidos de paroxismo y vanidad infinita sin cortarse un pelo mientras los escuchantes no damos crédito a tanta necedad.

Y uno no deja de maravillarse ante la desfachatez y el profundo infantilismo de las proclamas que proponen quienes afirman ser profesores universitarios y cuyas propuestas ya quisieran llegar a la altura intelectual del profesor Franz de Copenhague, ese gran genio de los inventos del TBO que nos cautivó de niños y nos inició a algunos en la lectura. Y al resultar éstas unas estulticias más bien dignas de barra de bar con acre olor a borrachuzo realizadas por supuestos ilustrados próceres de la ciencia política, no es que los líderes del grupo tengan que salir corriendo a rectificar el último disparate y donde dicen digo decir Diego, como cualquier político presidenciable o aspirante al uso; no. Es que donde dicen digo dicen bicicleta, tiza, piedra, papel, tijera según tantean el pulso de la opinión publica. Y así, de disparate en disparate van cubriendo un programa tan cambiante como las dunas del desierto, que hoy están aquí y mañana allá.

No es que estemos en una situación como para tirar cohetes, pero aunque carezcamos de libertades colectivas, por lo menos las libertades individuales como la propiedad, el derecho al contrato privado, etc, de momento los mantenemos. Pero por los disparates que ellos mismos han manifestado, como estos enemigos de la libertad lleguen al poder ya podemos olvidarnos de ella; de la libertad, claro. 


Para mejorar las cosas, ante el bautismo de sospechas y acusaciones de corrupción, parece haberles pillado a todos con el carrito del helado y ser corruptos antes de empezar; que ya tiene mérito. Y su defensa es el pueril: “yo no he sido, es que la casta me tiene manía y me acusan: todo mentiras de la casta que teme perder sus privilegios”, pues el panorama no resulta muy tranquilizador.

Pues nada, que sigan afirmando los muy catetos que ellos son limpios y puros de corazón y lo seguirán siendo cuando consigan el poder, y que además podrán responder no solo de la pureza de sus corazones sino de la de todos los demás miembros del partido que ocupen cargos públicos por el simple hecho de ser bautizados dentro de la secta. Es algo que maravilla a cualquiera que no sea un ignorante: Santo, Santo, Santo es el Señor; por eso deben sentirse ese nuevo papa recién elegido en cónclave y sus obispos tan cercanos al verdadero Santo Padre. Ahora, también hay que decir que más cateto será quien les crea, claro; y mucho más iluso quien les vote.

Para qué le vas a explicar junto a sus ciegos acólitos que la corrupción no es un problema de genes o de buenas intenciones ni promesas ni de pertenecer o no a la secta o la tribu, sino de que si un sistema te lo permite entrarás quieras o no en el “slippery slope” como lo denominan los anglosajones o “pendiente resbaladiza” donde solo por asomar el pie resbalas y ,zas, empiezas en caída libre hacia la corrupción y el inevitable abuso del poder. Para qué les vas a explicar que el poder sin control lleva sin remisión a los peores excesos que el hombre ha llegado jamás a cometer: que semejante hecho está estudiado, comprobado históricamente hasta la saciedad, y dicho por activa y por pasiva por las mentes mas preclaras de la Humanidad, por los más agudos filósofos en esa ciencia política que tanto desconocen por muy profesores que sean. Pero sabrán esta manada de bisontes desbocados y que arrasan el sentido común atropellando sin miramientos la libertad a su paso, que sin representación que surja en el origen de la sociedad civil no puede haber libertad colectiva. Que si no se separan los poderes y se monta un sistema en los que unos poderes sean enemigos de los otros poderes, y desconfíen y se vigilen entre sí, el abuso de poder está garantizado y por ende la corrupción.


Ya sabemos que no disponemos ni de un solo partido civilizado por aquí todavía: todos nuestros partidos políticos están por civilizar porque ninguno pertenece ni ha pertenecido jamás a la sociedad civil. Y no solo en España, es un mal endémico europeo producto de la guerra fría, pero ese es otro tema. Eso significa civilizado: pertenecer a la sociedad civil; pero los hay que empiezan a apuntar maneras entre los partidos pequeños. Y lo que es más importante, se empieza a formar una corriente de pensamiento entre la sociedad civil, por lo menos en los medios sociales,  para arrebatarle los partidos al Estado de forma que lleguen a pertenecer a sus verdaderos propietarios: la sociedad civil. A algunos pequeños partidos les queda mucho por aprender, pero apuntan maneras porque sus objetivos son más patrióticos. Están más abiertos porque no han entrado en la vorágine del poder corruptor sin control. Pero aquel partido que entra a escena con soflamas incendiarias populistas solo le importa el baño de vanidad resultante de que hablen de ellos cada día en los medios y de obtener el poder, la riqueza y satisfacer una infinita ambición personal. Son todavía mucho más incivilizados que todos los otros partidos en el poder juntos. A su paso no volvería a crecer más la hierba de la libertad en mucho tiempo: es más, se perderían las libertades individuales, que esas si las mantenemos.

Palabras como lealtad al elector no aparecen en el diccionario de ningún demagogo populista porque qué lealtad van a ofrecer aquellos que ni siquiera la ejercen dentro de su propio partido, fuerzan una dictadura cuando predicaban lo contrario y se pelean como hienas por unos despojos de poder. 

Las soluciones son tan simples que por eso se desconocen y se esconden: representación que surja en el origen de la sociedad civil ¿Quieres democracia? Pues lucha por el diputado unipersonal de distrito pequeño, con carácter imperativo hacia el elector y revocable en caso de deslealtad hacia el elector, elegido por mayoría absoluta a doble vuelta si no se consiguiese en la primera vuelta dicha  mayoría. Y si tu representante no lo hace bien lo echas en cualquier momento de la legislatura, por inútil o tramposo. Ese es el primer paso hacia la libertad colectiva: hacia la democracia. El segundo anclaje sería una verdadera constitución que contemplara de forma newtowniana nada más que las normas de pesos y contrapesos para separar los poderes ejecutivo y legislativo, y además los enfrentara en tensión y desconfianza perpetua el una hacia el otro. Eso que dijo Montesquieu y eso es lo que Alfonso Guerra se apresuró a afirmar lapidariamente que había muerto.

¿Cuándo habéis escuchado a ningún partido mencionar el reglamento que conduzca a esas libertades? A quien menos le oiréis comentar nada de esto es al demagogo populista de manual porque solo ambiciona robar la libertad al pueblo. Así de simple. No lo olvidéis: votar no siempre significa poder elegir.


Vicente Jiménez


viernes, 16 de enero de 2015

#InMemoriam Por las Víctimas del Terrorismo



Españolito que vienes al mundo te guarde Dios.
Una de las dos Españas ha de helarte el corazón.  Antonio Machado


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La edad de la inocencia: aquellos años perdidos
Fotografía de Antonio Novo Medinilla (@novomedinilla)
En ésta nuestra querida España hemos sido castigados por la brutalidad terrorista demasiadas veces y disponemos de un luctuoso y terrible rosario de experiencias: la violencia ha amasado en su infecto lodo de intolerancia, crimen, xenofobia, muerte, asesinato y racismo un reguero de sangre y horror en estado puro.  El terrorismo no solo ha causado dolor a toda una sociedad de bien sino que ha sacrificado víctimas inocentes (todas las víctimas son inocentes sin distinción) en esa España que nos hiela el corazón. Y nos hiela el corazón porque Machado jamás debió ni imaginar que la perversidad más oscura llegaría a superar en semejantes cotas a la que él mismo debió de conocer: jamás un terrorista debería haber conseguido rentabilidad política, ni financiación, ni negociación ni uno solo de sus objetivos totalitarios. Cada vez que nos ha azotado durante los últimos cuarenta años hemos sentido ese nudo en el corazón y un océano de tristeza nos ha embargado junto a la rabia, el dolor y la impotencia. Lo hemos sufrido tantas veces en España pero nadie de bien ha llegado a olvidar y acostumbrarse. La sombra de los cipreses es muy larga en la noche del desconsuelo.
Y cuando comparamos las vergonzosas insinuaciones culpando a las víctimas y victimizando a los criminales en estos últimos treinta años uno siente una gran desazón y vacío en el estómago: uno se avergüenza de vivir en esta España porque bajo el falso manto de la libertad de expresión y la vergonzosa y claudicante corrección política los pusilánimes y acomplejados gobiernos han permitido que los terroristas se sientan héroes ante sus deshumanizados acólitos. Han permitido la lacra. Permitir el crimen o permitir reuniones secretas en Perpignan sin que el politicastro oportunista de turno acabe con sus huesos en la cárcel por apología y exaltación del terrorismo es un crimen de Estado. Permitir que los terroristas sean recibidos como héroes o reciban dinero público que yo pago con mis impuestos es un crimen de Estado y una cobardía. Cuando ETA atentaba yo no compraba ningún periódico. No quería que nadie se lucrase con la sangre de aquellas víctimas que jamás serían resarcidas del horror, la humillación y la vergüenza. En vez del acto de Estado condecorando a los policías muertos que ha brindado Francia a sus fuerzas de seguridad y sus ciudadanos, nuestros policías eran enterrados sin reconocimiento social: sin el agradecimiento que su inmenso sacrificio merecía. Ese reconocimiento estaba en los bien nacidos, pero nunca lo pudimos exteriorizar.


Fueron los medios quienes contribuyeron a alimentar al monstruo porque lo que buscaban los terroristas era protagonismo y los medios de comunicación se lo proporcionaban puntualmente: las primeras páginas de todos los periódicos principales anunciaban el crimen en primera página. No con mi dinero. El que el gobierno entregaba a los asesinos por medio de partidos políticos y asociaciones con mis impuestos no lo podía controlar, pero ese día ningún periódico ganó dinero conmigo.


Este pueblo bobalicón compraba todavía más periódicos el día del atentado sin percatarse que estaba beneficiando a los terroristas. Si todos hubiésemos castigado a los medios se hubiesen tenido que tragar la noticia y puede que se hubiesen salvado muchas vidas. Los periódicos de EEUU realizaron el 11S un pacto patriótico para no publicar ni una sola foto de la muerte. Jamás leí una sola noticia o vi una imagen que beneficiase a los criminales. Esas luctuosas noticias hubiesen merecido un comentario en nuestros medios, pero de cuatro líneas insertadas en el lugar menos importante del diario. Hemos tenido editores sin conciencia y gobiernos pusilánimes que no le han parado los pies a los gobiernos autonómicos traidores que coqueteaban con los terroristas. La pluma tiene mucha fuerza y el Estado más. Hemos tenido gobiernos que han mantenido a nacionalistas lucrándose obscenamente del sudor del trabajo de los españoles cuando lo fácil hubiese sido anular las autonomías desleales. Hemos tenido gobernantes pero nunca hombres de Estado como lo fueron un Lincoln, un De Gaulle o un Churchill. Simplemente hubiesen tenido que aplicar la Constitución. Y cuanto más se les daba a los enemigos de la libertad más desleales se tornaban y más impulso cogían. Solo a un ignorante que no entiende ni sabe nada de historia ni del origen de los nacionalismos se le ocurre la estupidez de que a un chantajista lo contentas dándole todo y más y más, porque nunca se saciará y el nacionalismo no es más que chantaje de Estado y sometimiento de la sociedad civil.
Y viendo la movilización que ha tenido lugar en París no se puede dejar de considerar con cierta admiración la reacción de nuestra vecina nación levantada, todos a una, contra los criminales. Y por supuesto, todo bien nacido se une en el dolor con Francia porque no hay víctimas de primera ni de segunda categoría. No hay justificación: ese debiera haber sido el lema durante estos treinta años..., no hay justificación. Quienes justifican el terrorismo no están ejerciendo la libertad de expresión sino que son reos del delito de enaltecimiento y apología del terrorismo. Llamemos a las cosas por su nombre y sin complejos. Pero dentro del dolor ante los espantosos sucesos que han azotado a nuestro país vecino, uno tampoco puede dejar de plantearse ciertas cuestiones. Cómo se entiende a los del 98 cuando decían que España les dolía. Ya lo creo que duele.
¿Es que los policías, guardias civiles y militares asesinados de la forma más cobarde y cruel por  terroristas desalmados merecen menos consideración que las otras víctimas asesinadas con igual crueldad y cobardía en Francia? ¿Es que hay víctimas de primera y de tercera? ¿En qué tipo de mundo esquizofrénico quieren hacernos vivir?
Sólo queda admirar cómo han tratado los franceses a los terroristas y la solución final que han recibido los criminales: pero en España tendríamos a toda una fauna tan desalmada como los mismos terroristas organizando manifestaciones para tildar hipócritamente de asesinos a nuestra policía por haber acribillado a tiros a los terroristas. Esa gentuza prefiere ver caer a un honrado padre de familia que se está ganando el pan y el de su familia protegiéndonos a nosotros y arriesgando heroicamente su vida antes que un terrorista sufra un pequeño rasguño y tengamos que ponerle una tirita. Esa España que te hiela el corazón está plagada de esa infecta plaga que no se diferencia en nada con la que alaba al terrorismo yihadista. Una plaga que se hace fotos junto a terroristas y después quiere presentarse para gobernar España. Esa parte de la España cainita que te hiela el corazón pero ya casi a 0ºK (es el cero absoluto, ausencia total de calor) tiene en mayor consideración al canalla que secuestra o pega un tiro en la nuca porque al fin y al cabo el acto criminal lo había cometido un chicarrón; puede que demasiado expeditivo y algo equivocado en los métodos, pero según los partidos nacionalistas acertados en los objetivos sabinianos. Queda justificado así organizar manifestaciones y declaraciones cuyo evento vomitan esos grandes medios para apoyar a los terroristas cuando la justicia los coloca donde se merecen.
En esta España que te hiela el corazón las víctimas se han tenido que organizar porque el Estado los ha dejado desamparados y tenían que enterrar casi en la clandestinidad a sus muertos asesinados, y las familias de las víctimas eran condenadas al ostracismo y la amenaza por una población demasiado asustada y cobarde para apoyar a los verdaderos mártires y donde los mismos curas, en demasiadas ocasiones, se negaban a llevar a cabo los oficios religiosos al cadáver porque justificaban y aplaudían en sus sermones las proclamas de Sabino Arana. Y claro, vas tirando del hilo y te empiezas a preguntar si en realidad existe mucha diferencia o no entre esos curas que enaltecen el terrorismo y los imanes que llaman a la yihad: ambos llenos de rencor, odio, intolerancia y fanatismo. Ambos prometiendo el cielo para quienes asesinan. Ambos ordenando el asesinato.
En esta España que te hiela el corazón no hay muchas diferencias si hablamos de integrismos. La carroña huele en todas partes y curas del infierno los hay  en todas partes: el infierno lo tenemos aquí y sus representantes triunfan en esta España que te hiela el corazón por debajo ya del cero absoluto, aunque esa temperatura no exista en la naturaleza pero sí en el corazón.
Y a uno no se le quita de la cabeza qué hubiese ocurrido si nuestra policía hubiese salido por TV acribillando a balazos a un terrorista: nuestra manifestación hubiera sido secuestrada; hubiese sido a favor de los terroristas con toda la parafernalia de los derechos humanos de escudo para los asesinos y del mundo de la farándula encabezando la lúgubre parada de pancarteros profesionales y de paso apareciendo en la foto, porque como artistas no llegan ni a mediocres y hay que vivir de la subvención. Claro está, las víctimas del terrorismo carecen de derechos humanos, faltaría más. Y ante ese mundo mediocre compuesto por mediocres es ante quienes los medios de comunicación se arrodillan sumisamente ofreciéndoles sus micrófonos para que vomiten sus exabruptos. España no puede llegar a helarte más el corazón. Españolito que vienes al mundo...



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miércoles, 4 de junio de 2014

Respuestas a siete preguntas clave desonocidas sobre democracia


  ¿Alguna vez tuvimos democracia?

Igual que el éxito de la república constitucional de EE UU es hija de la Revolución Americana nuestra partidocracia europea es hija de una serie de luctuosos hechos que llevaron al fracaso la Revolución Francesa. Entre ellos, hemos de agradecer al abate Sieyès la decisión de haber despojado a la sociedad civil de sus dos armas más poderosas para controlar al poder y permanecer representada:
El mandato imperativo de los votantes.
Revocar el cargo al diputado en caso de deslealtad.
Explica con claridad meridiana A.G. Trevijano en su Teoría Pura de la República cómo con ello el abate Sieyès consiguió el 17 de junio de 1789 que la Asamblea (equivalente a nuestro actual Congreso) pudiera proclamarse soberana y así, gracias al consenso de sus voluntades particulares, pretender representar la voluntad general eximiendo al diputado de toda responsabilidad ante sus electores. 

Así se hizo imposible que un todo nacional admitiera  mandatos imperativos de las partes, es decir, de los distritos, pues Sièyes borró de un plumazo el mandato imperativo y la revocación de diputados al proyectar la soberanía sobre la Asamblea. Los ciudadanos se quedaron sin nada y la Asamblea con todo.

¿Por qué sí tuvo éxito el experimento de la democracia americana después de la Guerra de Independencia de EE UU?

Describe milimétricamente Tocqueville cómo los constitucionalistas de la Revolución Americana abordaron la cuestión del traspaso del poder desde las comunidades al Estado gracias a la exquisitez de las costumbres democráticas adquiridas por las colonias de Nueva Inglaterra antes de la Revolución; y la forma y circunstancias de cómo pasaron al resto del territorio americano con menos tradición democrática. Tocqueville analizó con tal inteligencia sus observaciones, que años después sería considerado por los useños en un lugar de honor junto a Washington, Jefferson y Madison, casi como si fuese un americano honorario. Al contrario que Sièyes, los Padres de la Patria del primer experimento democrático que tuvo éxito: Jefferson, etc, se obsesionaron por garantizar i sustancialmente tanto el poder de la representación como la relación concreta de lealtad con el colectivo representado. En tal caso la legitimidad quedaba enteramente en manos de la sociedad civil y la legalidad en el Estado.

¿Puede haber representación en las democracias de repartos proporcionales?

Los científicos utilizan modelos para entender mejor procesos más complejos. Para dar a entender el concepto de representación Trevijano apunta la equivalencia entre dar poderes de representación judicial a un procurador ante los tribunales y los poderes que el ciudadano concede a un diputado ante las Cortes. En ambos casos, los poderes son mandatos imperativos y revocables. En derecho civil, el poder notarial otorgado al apoderado carece de eficacia jurídica si éste no especifica las facultades concretas que contiene. El poder notarial equivaldría al voto de confianza que el elector le da al elegido para que cumpla como mejor pueda con su programa electoral.

No es difícil deducir que todas las circunscripciones deben ser equivalentes en número y atributos. En esa diferencia de planteamientos se establecen la fronteras entre la democracia formal y la democracia de representación proporcional. Si las mónadas ii no son equivalentes iii la representación falla y de ahí el error de la proporcionalidad, ya que en ese caso los atributos de la mónada dejan de ser equivalentes..., dejan de ser genuinos y el poder en vez del ciudadano lo tiene el partido satisfaciendo el desleal planteamiento de Sièyes para el pueblo.

¿La democracia interna de los partidos garantiza la democracia a los ciudadanos?

Cuando el poder lo tiene el partido el jefe de partido confecciona las listas solo o con un pequeñísimo grupo selecto, y la relación de lealtad se establece entre el que hace la lista y los listados. El poder lo tiene el jefe de partido que incluyó al diputado en su lista de candidatos y los votantes quedan fuera de la ecuación.Volvemos de nuevo al planteamiento de Sièyes; y este fenómeno se da en toda Europa, especialmente en el arco Mediterráneo. Por eso los países del Mediterráneo tenemos los mismos problemas: España, Italia, Grecia...

La gran novedad: democracia dentro de los partidos, ¿y qué pasa con la ley de hierro?

Otra posibilidad resulta de la tímida novedad que está empezando a ponerse de moda en algunos  partidos: democracia interna a la hora de elegir y confeccionar listas, delegados, avales, etc. Pero incluso en esa situación el poder seguiría en manos del partido y no del ciudadano. No salimos de Sièyes. Además, la democracia interna de los partidos nada tiene que ver con la democracia externa a los partidos. A los ciudadanos lo que nos interesa es la democracia externa; lo que pase dentro de los partidos no atañe a nuestros intereses.

Además,  teniendo en cuenta un principio universal conocido hace más de 100 años; la Ley de Hierro de Robert Michels, que fue quien estudio la socialdemocracia alemana y demostró que en la vida interna de esos partidos de masas (donde hay muchos afiliados) los dirigentes no pueden manipular con el juego de mayorías y minorías o con malabarismos asamblearios a todos los afiliados, y por lo tanto no puede haber democracia interna: un partido funciona como una unidad funcional y son los aparatos de partido, las pequeñas minorías internas de burócratas dirigentes los que dirigen la vida del partido. Precisamente los partidos utilizan el nombre de vida orgánica para disimular eludir la palabra democracia y aplicar precisamente la ley de hierro. Tal como se ha mencionado antes, en realidad,  a los ciudadanos nos da igual lo que ocurra dentro de los partidos. Lo que nos interesa a los electores es lo que acontece fuera del partido; es decir, si los votantes mantenemos el control en todo momento sobre la lealtad de nuestros representantes mediante la revocación y el mandato imperativo. Se concluye que si nos dicen que el ciudadano goza de democracia porque el partido es internamente democrático o son unos ignorantes o nos intentan engañar. Lo importante es el circuito de lo civil a lo Estatal. Ese es el gran engaño de Podemos; y ellos saben que al final se quedarán con la marca, el poder y los ciudadanos con nada. En todo caso pueden llegar a fingir unas asambleas que se parecerías a las que realizan las comunidades de vecino donde el administrador lo lleva todo preparado y casi decidido o los disidentes pueden ser fácilmente acallados o controlados. Podemos no se apartará de Sièyes y ellos lo saben..., o son unos catetos ignorantes. Y si no, al tiempo...

¿Cuando estar tranquilos?

Solo cuando el mandatario es el votante y el mandante el diputado. Cuando un diputado de distrito ha vencido a todos los otros candidato debería ser porque su programa político coincide con los intereses concretos de ese distrito iv. Ello consigue acercarnos a intereses tangibles como puedan ser defender las patatas que se producen en nuestro distrito electoral y nos aleja de cosas poco prácticas más cercana a los ideales y las utopías.
“El interés mayoritario definido por los votantes, hace improbable, bajo pena de revocación, que transforme en poder propio la potencia representativa de una concreta diputación ajena. Si el diputado de una mónada política es inteligente y culto no necesita ampararse en la ficción, inventada por Sieyès” Trevijano, Teoría Pura de la República, pág 377

¿Por qué los diputados solo pueden proponer leyes?


El problema que se plantea aquí es cómo y en qué momento se pasa de lo civil a lo estatal. Parecería a simple vista que poner un filtro a la legislación que puedan aprobar los diputados teniendo en cuenta que son elegidos en distritos pequeños, uno por distrito y con carácter imperativo y revocable sería poner un filtro al deseo mayoritario de los votantes. Pero como bien apuntó Montesquieu los poderes cuanto más separados, desconfiados y vigilándose los unos a otros mejor. No se puede dar el inmenso poder de legislar a a la cámara de diputados y ya está. Por ese motivo tiene que haber una cámara intermedia antes de llegar al Estado que de el carácter coercitivo a las leyes. Esa cámara, a su vez, no puede aprobar nada que no le haya llegado de manos de los diputados. Habrá un tira y afloja hasta que se pongan de acuerdo y la ley se apruebe. En EE UU, además, esa ley la tieneque aprobar el Presidente y por si fuera poco los useños dividieron la cámara de diputados en dos mitades. En caso contrario la ley vuelve a la cámara con las rectificaciones oportunas y el tira y afloja reitera el circuito hasta que la ley se aprueba o rechaza. Cómo decidiesen los expertos en Derecho Constitucional (pues eso es lo que debe recoger una constitución: la separación de poderes y representación) es tema de expertos, como queda dicho

Agradecimiento


Aprovecho para agradecer a A.G. Trevijano la información que me ha proporcionado con su maravillosa Teoría Pura de la República y otros apasionantes artículos y audiciones difundidos en RLC. También el e-curso a distancia de la Univesidad de Yale sobre filosofía política al que cualquiera puede tener acceso gratuitamente han corroborado los postulados trevijanistas basados en el camino recorrido por los grandes filósofos de las ciencia política y el devenir de la historia. Esas fuentes me condujeron por una apasionante bibliografía, ya que lo importante es el asesoramiento de qué libros leer cuando deseas por lo menos rascar la superficie en algún tema. La propia corroboración de la experiencia personal y la vida también son buenas maestras.

Por último, agradezco también a todos los que estáis colaborado con vuestros comentarios en este blog; algunos de vosotros tan asiduos que casi parece que nos conocemos y hemos realizado un trabajo en equipo. El apartado de comentarios siempre permanecerá abierto para vosotros. Podéis revisar y rebuscar. Puedo tardar pero suelo contestar a todos los comentarios.

Y por último, agradezco a los lectores que tenéis la paciencia de seguirme: en el momento de escribir estas líneas compruebo que hemos llegado a 102 122 lecturas.


Cuando no he puesto bibliografía, a veces y por cuestión de tiempo, he enlazado con otro artículo que amplía el concepto y sí hace referencia a esa bibliografía o directamente enlaza con el libro. A veces los libros incluso se pueden adquirir colgados en formato pdf en internet.
Para mí, queda la cuestión sin responder de si se desconocen o no por parte del colectivo de políticos, partidos, tertulianos, medios y catedráticos el verdadero significado de la democracia formal: si la respuesta es sí entonces nos están engañando y si no las conocen habría que concluir que son unos ignorantes (de ignorar - todos ignoramos, pero cosas distintas). Ahora bien, si son ignorantes y yo sin tener nada que ver con la política he podido averiguar qué es la democracia, cómo funciona, las fuentes de pensamiento, etc; ¿cómo ellos, que se dedican a la política ignoran verdades y principios tan básicos y universales?



Vicente Jiménez

Notas
i Las dudas de los constitucionalistas americanos de 1787, sobre la competencia para promulgar las leyes, están en la propia redacción de la sección séptima 2 del artículo 1 de la Constitución de EEUU: “Todo proyecto aprobado por la Cámara de Representantes y el Senado se presentará al Presidente de los Estados Unidos antes de que se convierta en ley; si lo aprobare lo firmará; en caso contrario lo devolverá, junto con sus objeciones, a la Cámara de su origen, la que insertará íntegras las objeciones en su diario y procederá a reconsiderarlo. Si después de dicho nuevo examen las dos terceras partes de esa Cámara se pusieren de acuerdo en aprobar el proyecto, se remitirá, acompañado de las objeciones, a la otra Cámara, por la cual será estudiado también nuevamente y, si lo aprobaren los dos tercios de dicha Cámara, se convertirá en ley... Si algún proyecto no fuera devuelto por el Presidente dentro de 10 días (descontando los domingos) después de haberle sido presentado, se convertirá en ley, de la misma manera que si lo hubiera firmado, a menos de que al suspender el Congreso sus sesiones impidiera su devolución, en cuyo caso no será ley”.


iiLa brutal idea de mónadas artificiales fue el contrasentido que condujo a las monstruosidades del nacionalismo y del comunismo de Estado, donde los símbolos se tomaron por representaciones y las ideas por dominaciones Trevijano, Teoría Pura de la República, pág 372


iii Si ésta es muy extensa y poco intensa, sea porque la circunscripción electoral es demasiado grande o porque el programa del candidato elegido es indefinido, desaparece el carácter relacional de la representación, y ésta se polariza en poder independiente e irrevocable.


Este sistemático desvío de la función representativa se produce con el sistema de elección proporcional, que convierte en poder de partido lo que sólo era facultad personal de realizar el programa electoral aprobado en un distrito electoral pequeño.


ivDistrito en el sentido de mónada

viernes, 11 de enero de 2013

Igualando pero por debajo



 En ciertas ocasiones, para que ocurra un suceso se necesitan la confluencia de muchas circunstancias a la vez. Y a veces, con que falle una sola de ellas, el evento no llega a producirse jamás. Es la eterna discusión de determinismo, o no. Einstein llegó a la conclusión de que Dios no podía estar jugando a los dados con nosotros y Stephen Hawking afirma que Dios no sólo juega a los dados, sino que a veces también los echa donde no se pueden ver. Bien, pues nosotros escogemos la libertad de pensamiento y lo dejaremos fluir en un pequeño ejercicio mental ...
Si nos cuestionamos qué relación pueden llegar a tener; “ Niagara -piezas – bicicleta – crisis - catarata y caja”; podemos en seguida contestar una parte del enigma: Cataratas encaja con Niagara, pero para el resto es difícil encontrar una relación. Intentadlo unos segundos …
Para solucionar un problema primero tenemos que hacernos las preguntas correctas: la crisis, ¿ha sido fruto de una especie de sistema interactivo de elementos causa efecto? Las primeras causas fueron programada o frutos del azar? ¿El todo (la situación actual) es más que una suma de las partes? ... ¿O bien ha pasado ese "todo" por casualidad y mala suerte?
Al no poder ni siquiera estar seguros  cuándo formulamos las preguntas correctas utilizaremos un modelo: éste nos permite plantearemos una situación más sencillas que después podemos traspasar al problema real en estudio, y  puede que lleguemos a algunas conclusiones.

Supongamos que tenemos    desordenadas todas las piezas de una bicicleta por el suelo y pensamos -¡menudo lío!- Si tal como están, las recogiéramos todas y las metiéramos en una caja metálica, con una tapa de cierre hermético, ¿habría posibilidades de que moviéndola enérgicamente, a ver qué pasa, esas fuerzas ordenasen las piezas y montasen la bicicleta? 

También le podríamos aplicar corrientes eléctricas, o precipitarla por las Cataratas del Niágara; y como el peso del agua que desaloja sería mayor que el suyo propio (pongo esta pequeña condición), pues flotaría y la podríamos recuperar después de haber sufrido infinitos vaivenes. Las partes de esa bicicleta seguirían, con mucha mucha probabilidad, desordenadas; y sin duda en peor estado. Es decir, aún nos alejaríamos más del orden en una situación mucho más caótica y seguiríamos sin poder disponer de la bici para practicar nuestro deporte favorito. Por lo tanto, dejar el montaje de las piezas de la bicicleta, al azar, no nos serviría de mucho, considerando las probabilidades.

Pero si, con habilidad mecánica y paciencia ajustamos cada pieza en su lugar, sí que la tendríamos lista para pasear. Aquí, el todo (la bicicleta) sería más que una simple suma de las partes (como cuando estaba sin montar). Es a partir de ahora donde podemos tomar nuestra bicicleta como modelo de la crisis y planteárnosla, o no, como una suma de partes caóticas que nos han llevado al desastre, o como una bicicleta bien montada para que unos cuantos se suban y se den un agradable paseo a nuestra costa. O bien, ¿un poco de cada cosa?

Si fuese una suma de partes caóticas que nos han llevado al precipicio, a la crisis; pues entonces no tendríamos nada que hacer. Agua y ajo ¡Mala suerte! Habría que salir adelante como fuese … Y lo que es peor: nunca podríamos controlar nada porque no habría habido culpables, en nuestro modelo ciclista no ha habido mecánicos hábiles capaces de montar nada. Volvería a ocurrir lo mismo por diferentes circunstancias, ya que también éstas escaparían a nuestro control, opción que no nos interesa.

Si la crisis nos la han montado unos “golfos” para disfrutar del paisaje campestre desde el sillín de su bicicleta robada, habría motivos para estar muy enfadados, aunque fuese por motivos de supervivencia; y deberíamos tomar medidas (el control) para que no nos la vuelvan a liar .

Si es un poco de cada, habrá que pensar que ha intervenido el factor suerte, para esa minoría de golfos, y mucha mala suerte para la población. Ahí hubiera estado el azar ayudando a quienes pretendían llevar a cabo este desaguisado y enriquecerse enviándonos a nosotros a la indigencia.

Aunque debemos pensar que para ayudar al factor suerte ya debía haber un premontaje de muchas piezas de nuestra bicicleta. Es decir, que muchas condiciones para que llegáramos a esta situación estaban ya trabajando en nuestro contra, y esta opción también implica culpables.
¿Cuáles serían esas piezas ciclistas en el momento que estaban en el suelo?
  1. Crisis de valores; en la que ha tenido mucho que ver el relativismo potenciador de una nueva y falsa doctrina destructiva, cuyo nombre es “corrección política”. Esa corrección política ha sido fruto del montaje, primero mediante la manipulación, aprovechando verdades a medias y mentiras a medias. y después mediante la aplicación del poder en caso de disensión. Más perverso que la ausencia de valores es la vinculación, voluntaria u obligatoria, a falsos valores. Y lo peor de todo; la corrección política es antagónica a la libertad de pensamiento. Donde hay la una, no puede existir la otra.
  2. El ciudadano ha gastado más de lo que podía permitirse, y esa deuda impagada tiene que ser asumida por los bancos y después, esos bancos rescatados por nosotros. Eso nos han dicho … ¡Oyes! Y aquí todos coinciden y nadie lo discute... Pero resulta una verdad a medias. Ha sido el truco del palo y la zanahoria. Al ciudadano le han hecho creer que podría disfrutar ahora de unos bienes antes de ganar el dinero comprándolos con el trabajo que realizara en el futuro. Al quitarle el trabajo, no sólo le han robado el futuro sino el presente y el pasado. De pronto, alguien ha cortado el grifo de golpe en el momento oportuno. Los ricos se han vuelto más ricos y la clase media más pobre ¿Y quieren que creamos que estas dos piezas se montaron solas cuando caían en una caja por una catarata? Aunque no podemos considerar certezas sí podemos hablar de probabilidades. Escojan Vds. señores ...

    Conozco una empresa, perteneciente a un consorcio internacional, con sede en Holanda, que tenía planificado, hace ya más de cinco años, cerrar justo para cuando precisamente saltó lo de la burbuja y los trabajadores a la calle con una mano delante y otra atrás... ¿Casualidad? Los trabajadores, con una media de antigüedad de treinta y cinco años, tuvieron la suerte y la inteligencia de atar cabos sueltos y forzar el cierre antes de esa fecha. Desde luego, no sospechaban lo de la crisis, pero se dieron cuenta de las intenciones de ese grupo inversor. Fue aquello de coge el dinero y corre antes de que vengan los ladrones y se lo lleven por ti.
  3. El papel de los sindicatos ha sido patético, interesados en mantener privilegios y constituirse como casta. Los mismos liberados de siempre llevan años y años en la poltrona sin dar palo al agua. Al estar subvencionados están sujetos a corrupción y … ¿para que van a defender a los trabajadores si sus privilegios se mantendrán cierren las empresas que cierren? Y si consideremos que a más ERES más ganancia, pues como que los trabajadores no juegan con cartas muy buenas.
  4. Hemos perdido derechos añejos que ya se tenían antes de la transición. Ahora se trabaja en condiciones que jamás antes se hubieran aceptado; y que en estos momentos, viéndose en la cola del paro, el trabajador admitirá por supervivencia. ¿Casualidad? En mi opinión la misma que la de nuestra caja flotando por las Cataratas del Niágara, pues tendréis que admitir que es mucha casualidad que una rosca fije un pedal por puro azar. Nosotros, cada vez más cerca de  condiciones laborales tercermundistas y los pequeños empresarios sin oportunidades y condenados también a la indigencia. Cada vez más dependientes de los grandes grupos de inversión y trusts.
  5. Las inversiones del estado han sido muy mal planificadas, contando con un dinero de fondos europeos a los cuales no se les ha sacado rendimiento, derrochando con obscenidad ese dinero sumado al del contribuyente, porque como “no era de nadie” mejor que acabe en una cuenta personal. Y así se completaba el circuito, muchas veces, en el lugar de donde salió; en cuentas de los paraísos fiscales. Tampoco es cierto, no creo que ningún gobierno cometiese la estupidez de creer que le iban a regalar el dinero. Cualquier trabajador que se hipotecó para tener un techo y un coche, sabía perfectamente que los recibos de la hipoteca eran sagrados; y o los pagaba o se quedaba sin casa. Así, los gobiernos debieron hacerse el mismo planteamiento.

    Normalmente una familia contaban con el sueldo de la pareja: uno para pagar la hipoteca y otro para los gastos. Incluso había para costear algún pequeño lujo de vacaciones o lo que fuera.¡Ah!, pero es que los gobiernos que hemos tenido, que son más de diecisiete, sabían que ellos no tendrían que pagar los préstamos, que para eso estába el pueblo. Ellos, responsabilidad cero con una patente de corso que les aseguraba el indulto, en el peor de los casos. Y encima, los políticos se intercambian y asignan, sin el menor pudor, medallas y sueldos vitalicios indecentes por una gestión más indecente todavía...
    ¿Y quieren que creamos que lo que ha pasado es por azar? ¿Simplemente que la diosa fortuna nos ha cogido manía a los españolitos de a pie? El ciudadano cayó en una trampa, y el político en una irresponsabilidad en el mejor de los casos, y en el otro nos hizo víctimas de su más abyecta ambición y corrupción. Por condenar a un pueblo a la misma indigencia que hubiésemos sufrido en un periodo de posguerra; pero sin haberla pasado, se autoasignan un jugoso sueldo vitalicio. Y tienen la jeta de llamarlo democracia.
  6. Corrupción en estado puro y duro. Cuando la corrupción penetra en una sociedad ¿puede ésta sobrevivir? Su objetivo colectivo de unión y progreso se pierde, y se cambia por otro individual, interesado y de saqueo. … un organismo gangrenado tiene pocas probabilidades de sobrevivir si no cercenamos. Y aquí podemos englobar cajas de ahorro, directores corruptos con indemnizaciones indecentes, saqueos sistemáticos de fondos … en fin. Todo lo que nunca se castigará y todo el dinero que jamás recuperaremos.
  7. Este saqueo es responsabilidad de un sistema corrupto que no es democrático. Los dos grandes partidos han gobernado bajo el chantaje de los nacionalista; es decir, de aquellos cuyo objetivo es destruir España. Como lo que ha importado es la supervivencia del partido, pues eso es lo único que ha sobrevivido ¿o veis a algún político, a algún familiar de político en la cola del paro y condenado a la indigencia? Y lo que es peor. Si no cambiamos el sistema, si no llegamos a un consenso, la mayoría de los españoles para eliminar la partidocracia y sustituirla por una democracia real con división de poderes y un control exhaustivo de la gestión que hacen los políticos de nuestros bienes, el abismo entre clase parasitaria e indigentes será cada vez mayor.
  8. A la orgía se han sumado ayuntamientos, comunidades autónomas, sindicatos, infinidad de asociaciones subvencionadas, el mundo del arte y tantos, tantos otros; que la escisión social ya es un hecho. Cuanto más se separe una de otra más difícil será arreglarlo; a menos que fracasemos del todo como sociedad y esto acabe en una guerra civil. Eso satisfaría un curioso principio, donde el caos se arregla con otro caos peor, y mucho más destructivo: los llamamos revoluciones, guerras. Es como cuando apagan un incendio con una explosión u otro incendio controlado; y eso es lo que ocurrió en la Revolución Americana o la Francesa. ¡Cuidado con los patriotas o su versión más salvaje e incontrolable de los sans culottes!
Hemos pasado del “pienso, luego existo” cartesiano al pago impuestos, luego existo. Dicho ministerio es el más importante y donde no se ha escatimado en gastos y tecnología punta. Donde están los mejores superordenadores … para controlarnos a nosotros - a ver si hemos cometido el pecado mortal; aquel en que eres culpable aunque demuestres lo contrario, como en El Juicio de Kafka… Mientras, la justicia, piedra angular de la democracia, tiene ordenadores obsoletos, humedades, expedientes amontonados en los lavabos, y la policía tiene que “pagarse las balas” y la gasolina. ¿Es casualidad que sean estos estamentos los peor tratados y que sean lentos de funcionamiento por falta de medios? Desde luego, nunca podremos pagarles su abnegada labor y los sacrificios a los jueces y policías honrados, que junto con el ejército constituyen la base que hace que no se nos caiga el edificio encima. Y luego estamos los de abajo, los que estamos en la trinchera … y los que trabajamos o hemos trabajado toda nuestra vida para pagar lujos y vicios de muchos que nunca serán juzgados. Y si lo son, ahí estarán estos gobiernos para indultarlos ¡Viva la Pepa!, pero 'Ojalá hubiera vivido!
Y las cuentas de los paraísos fiscales, sean en Suiza o en una Sicav engordan, mientras la clase media está sistemáticamente siendo saqueada y destruida.

Es verdad que se tiende a la globalización y a igualar, pero una parte de la población mundial se iguala en la pobreza y la otra en una riqueza cada vez mayor.

Y estoy seguro de que el amable lector, si ha tenido la paciencia de seguirme hasta aquí, analizará con más acierto y profundidad; y se le ocurrirán más puntos de forma más acertada que a mí. Pero eso no hará más que montar esa bicicleta de la que hablábamos al principio. Esa bicicleta no son piezas sueltas sino que cada una cumple su función y alguien las montó. En algunas o en todas partes de nuestro modelo ha hecho falta un mecánico y, en mi opinión, hay que abordar el problema desde dicha perspectiva, considerando que el todo es más que la suma de las partes ...

Si admitimos esto, entonces resulta evidente que tal como comentamos al principio, si falla una sola de las piezas se acabó lo de la bicicleta. Hay que encontrar la más débil o aquella en la que se pueda actuar. ¿Qué tal algo que podemos hacer entre todos? Exigir al gobierno una consulta, a todos los españoles, para ver si queremos seguir manteniendo las depredadoras autonomías. Después, se podría pasar a lo de sustituir la partidocracia por una democracia real.

Vicente Jiménez